La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) estudiará la composición geológica y vegetal de las ramblas de Casrrasquilla, Beal y Ponce para conocer qué especies pueden crecer allí y frenar la llegada de metales pesados al Mar Menor. Se trata de una investigación pionera que llevará a cabo un equipo especializado de la Universidad Politécnica de Cartagena ha tomado como muestra estos tres cauces, si bien el objetivo es aplicar los resultados en otras zonas del Campo de Cartagena.
Una de las presiones medioambientales identificadas sobre la laguna costera del Mar Menor es la contaminación química provenientes de las antiguas explotaciones mineras en su entorno. Los metales pesados depositados en estas zonas son persistentes y no biodegradables. Sin embargo, se ha demostrado que la revegetación con especies seleccionadas conduce al aumento de la fecundidad de estos parajes y permite finalmente la llegada de otras plantas, lo que puede llevar a la rehabilitación completa de los ecosistemas afectados.
Por tanto, la CHS estudiará la composición química de residuos, sedimentos y plantas en las ramblas escogidas y utilizará los resultados obtenidos para saber qué especies vegetales son las más adecuadas para recuperar cada cauce.